martes, abril 26, 2005

Mamá de camioneta

A mí me parece el colmo aunque ya nada me sorprende, al parecer es muy normal dentro del proceso. Ahora resulta que estoy anémica y cómo no con esta dieta vuélvete-anoréxica-a-la-de-tres que en tres meses me ha hecho bajar seis kilos. Cada vez que voy al doctor me restringen más y más alimentos. Primero comenzaron con el cerdo, nada de nada en ninguna presentación; después la vaca; el picante y los irritantes (casi todas las especias); la cafeína como puñalada de puedo decirle adiós al amor de mi vida, pero al café y a la coca-cola no sean gachos, me están matando; luego el alcohol y mi grito de ¿¡NADA, NADA!?, ok, sólo tequila y mezcal; los lácteos; el chocolate y mi lagrimita reprimida “no voy a llorar, no voy a llorar”; hasta me obligaron a despedirme de los chicles de menta y yerbabuena y yo agradezco que las citas sean semanales porque si fueran diarias a estas alturas sólo estaría comiendo alpiste. Bendito post-modernismo en el que se puede sustituir -imperfectamente, claro- el capuccino doble por uno deslactosado y descafeinado sin canela por favor, con mi pavor de convertirme en desAna Lucía, aunque me consuela saber que ni los pantalones me gustaban deslavados.
Me quejo, pero en el fondo agradezco que al menos ya no hay ofuscación, ya no lloro desconsoladamente a cada rato ni me atormento por el futuro como hace tres meses. Creo que yo solita me creo confusiones colombianas nada más para ya no recordar mis huesos chuecos y al menos ha funcionado, ya no le doy vueltas todo el día a las reumas y el miedo dejó de ser mi acompañante incómodo 24/7, ahora sólo hay malos días y buenas noticias, así es el tratamiento. O buenos días y malas noticias como hoy. El 26 de abril será recordado por el día en que me hicieron la mejor oferta de trabajo soñada, sin estarla buscando, era simplemente perfecta y tuve que rechazarla: medio de comunicación internacional (CNN), en el área de opinión pública y con análisis de encuestas. Tuve que ser súper mujer: decir que no deseando sí, con mi mayor odio a esta maldita enfermedad y lagrimitas con sabor a bilis que poco a poco se fueron cuando amiguita ofrecedora mencionó el sueldo (fiuf, al final no me perdí de tanto).
Ni modo, mi vida cambió radicalmente y no puedo aferrarme a querer estar como antes (evolución mamacita, evolución). Ha sido buena estrategia aceptar que no estoy bien, pero que voy mejor y que mientras mayores sean mis quejas, peores serán mis dolores así que adiós depresión bye, bye, bye, bye y ha funcionado, no cabe duda que es mejor ir por la vida riéndose de uno, que andar compadeciéndose o encerrándose en micro-dramitas y lagrimones del canal de las estrellas. Hay que sacar provecho de las situaciones y más ahora que resulta irónico cada vez que digo en mi casa que voy a salir que mis papás hasta aplaudan.
Súper ñoña, Lulú Marina gasta millones de pesos y de horas/mujer en lecturas sobre artritis reumatoide (que es la mía, porque luego me andan rebautizando las dolencias), más clavada que con el diplomado o la tesina. Ahora soy una experta al respecto, aunque no sea un tema tan relevante como la seguridad nacional o las elecciones en Estados Unidos. No me enorgullece, pero pertenezco al 1% de la población mundial que padece este trastorno femenino pues dos de cada tres artríticos son mujeres; ya sé que dentro de esa cifra me tocó estar en el 15% al que se le desata la enfermedad antes de los 30 años y también dentro del 10% de los que reciben la enfermedad con un “inicio” agudo (bienvenida de lero-lero-a-que-no-te-puedes-move-er), pero que en realidad no se sabe la causa de la enfermedad, sólo saben que en mi caso se originó al originarme yo por lo avanzada que está, por eso ahora se entiende mi sistemática propensión a otras afecciones, al tronadero estruendoso de articulaciones y no es que yo fuera rara por comerme los cartílagos y los huesos de pollo cual perrito hambriento, si todo en la vida tiene su lógica. El tema está de moda: se necesita una reforma estructural del sistema porque éste ya está muy desgastado, peor que la Constitución.
Mi sistema inmunológico ha vivido en la esquizofrenia atacando a sus amiguitas las articulaciones, dejándome indefensa ante el rotavirus, la salmonela y esas cosas raras que sólo a mí se me ha ocurrido andar padeciendo. También sé que si viviéramos en la Edad Media, esta enfermedad a mi edad no causaría tanta polémica porque ya sería prácticamente una viejita y está bien que sea oficialmente retro y posea la sabiduría de una anciana, pero no es para tanto digo, bájenle. Total que Ana Lucía siempre queriendo ser la número uno y súper original, por fin es por mucho la minoría de la minoría (0.1% de la población mundial, vamos, la crème de la crème para ser más específicos, el Jet Set de la élite mundial ¡yei!). Y qué maneras las mías de andar llamando la atención, me podrán decir todo, menos que soy poco original.
Y no, no sólo la ñoñería me ha ayudado a entender este rollito, también la práctica ha sido buena maestra. Con cuatro meses de padecimiento ahora sé que el coco-wash, el ungüento de ajolote, el efecto C3-PO y el frasquito místico de alcohol con golden de Guerrero es lo único que calman relativamente el dolor cuando entro en crisis (no, no he estado tan desesperada como para tomármelo, pero de que sería un viaje de altura no me cabe duda, lo más impresionante es que fue mi abuelita quien me lo dio... pienso, pienso); que me choca de toda la vida, pero mientras más ejercicio hago, mis músculos se hacen más fuertes y tengo menos dificultades para moverme y -bendito- que me estoy reconciliando con el piso por mi propensión a agredirlo bajándome a su nivel: ya no me caigo tanto como antes (¡bajan, bajan... sueeeloooo!), ah, pero qué tal el otro día que fue la mami quien se cayó y yo súper intrépida tratando de ayudarla, dimos un espectáculo que nos hizo llorar de risa después cuando ninguna de las dos podía levantarse, valientes ayudas las mías. Que las terapias duelen, cuestan mucho trabajo y me desesperan, pero que después me siento mejor y estoy recuperando movilidad (medio puño es medio puño, igual me faltan ocho añitos para llegar al campeonato Million Dollar Baby, pero ya no escucho el atormentador “perdiste el 80% de movilidad en las manos y vas por más”); que odio que me vean con cara de lástima cuando no puedo caminar bien o subir escaleras, pero que me reconforta saber que igual en otras culturas resulta sexy, así como caminar con los pies de flor de lirio en China; que mientras más paciencia estoy teniendo conmigo, más la tengo con los demás y me caigo mejor (y el timbre de mi celular suena al ritmo de los Pitufos y su: “la-la/la-la-la-la-la/la-la-la-la”, parece que oigo al peluches: mátame de miel, mátame de miel).
Jamás me cansaré de repetirlo, pero es que de verdad ha sido muy importante el apoyo de mi gentecita linda, todos los gritos de los docs, de los papis y la familia, de amiguitos, de mis profes y de mi gran cinismo que se subió al tren del reumatismo para apoyarme porque qué bueno que hasta me prohibieron trabajar “no estás en condiciones de comprometerte, no sabes cuándo vas a entrar en crisis y vas a terminar quedando mal” (y yo que no entendía ahora veo cuánta razón tenían), así que aprovechemos este tiempo egoísta en pilates y yoga y terapias y leamos y más terapias y veamos a amiguitos y tele y arreglemos el jardín y tal vez me hacía falta que me dieran un golpe como este para detener mi vida un ratito, valorarla y vivir más feliz y... ¡¡¡ser mamá de camioneta sin marido, sin hijos y sin camioneta!!! ¿Alguien contempla una circunstancia más maravillosa? Si es que en serio, las quejas son pura vanidad...

7 comentarios:

Ricardo Cortizo dijo...

Si en algo te caracterizas es porque te gustan los retos... y sabes salir excelente en ellos. Tú échale muchas ganas al asunto. Te entiendo porque vivo algo similar en mi familia, pero ¡actitud es actitud! y lo estás logrando.

Además éste espacio te está permitiendo desestresarte, divertirte (y divertirnos) y sentirte mejor, ¿que no?

Desde aquí te echamos porras.
Un beso enorme

Anónimo dijo...

Estoy en Madrid, a miles de kilómetros de distancia y me he emocionado muchisimo leyendo este post. Ojala pudiera estar ahi para darte un abrazo enorme.
No te olvides de nosotros porque nosotros no nos olvidamos de ti.
Mil besos.
Alicia

Anónimo dijo...

Solo quiero que sepas q TQM!! Si algun dia estas aburrida o quieres distraerte pues ya sabes que me puedes hablar para que nos tomemos unos tequilas mmmm.. ya se me antojo. 100 % actitud FUNAR

Anónimo dijo...

Tienes la actitud y tu mejor que nadie sabes que Actitud mata Circunstancia. Además supongo que con el colombiano ese rondándote ha de ser más facil conseguir la mariguana para el alchohol de la abuela, o no?!

Sugiero los videojuegos para esas horas de inactividad. Lo único que necesitas es una buena posición de espalda, el movimiento de dedo es casi nulo, ya no hay que apretar repetidamente y con fuerza el botoncito de disparar, y las aventuras son interminables; definitivamente un mejor hobby que el moto cross.

arboltsef dijo...

Alo muñeca, una conocida de mi infancia sufrio de artritis reumatoide, ahora el hecho es que siempre hasta su último día fue una mujer con gran actitud y con hijas divinas, igual era maá de camioneta y ni camioneta tenía, pero ese no es el punto... el punto es que siempre miro al frente, poco le importaba el dolor, siempre siguio adelante, ahora sus hijas unas profesionales y todo gracias a sus esfuerzos.
Dele con todo mujer, ya veras que todo por servir se acaba peeeeeero, mientras tanto saquele provecho, frente arriba, mucha actitud y de mi parte.
UN ABRAZO que sane el dolor aunque sea por un momento.
Salud!!!

Anónimo dijo...

Junto al envio de los mejores deseos y expresiones de cariño, gracias por recordarnos (en particular a mi) que efectivamente hay cosas mas importantes que las elecciones en EE. UU. y la Seguridad Nacional.
Gracias por compartir todo y un abrazo.

Ana Lucía dijo...

Así es señor Cortizo, no hay nada como el blog para sacar los traumas. Gracias por el apoyo, de verdad...

Alicia preciosa!!! Ni con amnesia los olvido, los extraño mucho mucho y muero de ganas de verlos. TQMMMM

Cucucharita, te amo!!!! Me gusta tu nueva actitud apoyadora el-FUNAR-se-vuelve-tequilero, gracias amigui.

Hola itamita!!! Sí, me gusta eso de que actitud mate circunstancia, jajaja, y pues no sé qué tan fácil le sea conseguir mariguana al man, pero me da la impresión de que tal vez siga siendo mejor la Golden de Guerrero que la mango biche...

Muchas gracias por los ánimos y el apoyo mono, de verdad...

Brunei!!! Sin palabras, gracias a vos y aprende pa q veas a lo q te lleva la ñoñería... Tnx, tnx, tnx

Ay Pepe!!!!
Sufro de sólo pensar en tus amigos los jarochos... Me da terror puro que se te ocurra la genialidad de hace un año y más que ya no tomo cubas como para andarme dando valor si va tu amigo y qué pena... Sufro!!! Y afalta un mes pepillo!!!