En la “cena” navideña del FUNAR, el club de ardidas decidió seguir un Cosmo-consejo. Cada quien tenía que pensar en sus propósitos e imaginar a las demás en un año. No tengo autorización para dar los resultados de mis funarcitas, pero a mí me fue muy bien, cosa que me deja pensando que mis amigas me adoran y sueñan con un futuro hermoso para mí.
viernes, diciembre 31, 2004
El 2005 según el FUNAR
En la “cena” navideña del FUNAR, el club de ardidas decidió seguir un Cosmo-consejo. Cada quien tenía que pensar en sus propósitos e imaginar a las demás en un año. No tengo autorización para dar los resultados de mis funarcitas, pero a mí me fue muy bien, cosa que me deja pensando que mis amigas me adoran y sueñan con un futuro hermoso para mí.
miércoles, diciembre 22, 2004
¿Por qué Ana Lucía cruzó el camino?
Querido Santa:Este año me porté muy, muy bien (en serio, tú así como Pedro Infante: “Si te vienen a contar cositas malas de mí, manda a todos a volar y diles que yo no fui”) Me gustaría que de regalo me trajeras una ciudad con más esperanza y menos tráfico, o un mejor sistema de transporte, o que ya se inaugure el segundo piso del Peri, o mejor un coche que vuele =) ; otras articulaciones o un producto más potente que el X-Ray; menos adornos para mi casa (¡urge!) o una casa más grande para que no se vea tan barroco el asunto; un recetario de cocina (¡ah, verdad!, eso fue broma, eso no porfis, de verdad, ¡¡¡FUE BROMA!!!); y a la gallina del pueblo innombrable hecha caldito (ay ándale Santa, no seas gachito). Saludos a Rodolfo y abríguense bien porque últimamente a todos nos está dando gripa, no vaya a ser que por traerme a Brad Pitt te me pongas mal...Lulú Marina
Pd
Gracias a ya saben quienes por ya saben qué. En particular a la llamada de “estas Navidades” y a los que nunca se pandean para el reven... Santa Roooooock's comin’ to town
domingo, diciembre 19, 2004
A un paso de quemar las naves
sábado, diciembre 18, 2004
El Clan
miércoles, diciembre 15, 2004
Gallinas y epazotes
lunes, diciembre 13, 2004
Maratón Lupe-Reyes
sábado, diciembre 11, 2004
El rival más débil
jueves, diciembre 09, 2004
Girls & the City - Desesperadamente buscando a Susana
Desesperadamente buscando a Susana
Como pretexto de secundaria, cada vez que conocía a alguien que pudiera comprometer la integridad de mi nombre, usaba el de Susana. Acababa de regresar del verano-de-mi-vida. Había pasado un mes en La Habana y otro en Montreal “estudiando”. Después de tener una relación de un año seis meses, a los días de haber regresado del verano-de-mi-vida, hubo diferencias irreconciliables entre nosotros y terminamos. No sé qué sentimiento era peor, el dolor por la pérdida de alguien a quien había amado tanto o la frustración por haberme portado tan bien teniendo tantas tentaciones alrededor para llegar y perder a la inspiración de mi fidelidad. Dentro de mí surgió una mini réplica del odio de Paquita la del Barrio hacia el género masculino y algunas de mis mejores amigas estaban pasando por una etapa similar. No creo que hayamos podido tener un mayor consuelo que el descubrimiento de la fiesta. Muchas de las personas que conozco vivieron esta etapa en la adolescencia, pero nosotras la vivimos a inicios de los 20, y aunque en ocasiones nos llegamos a ver bastante ridículas, no tengo recuerdos de esa etapa que no sean divertidos, incluso puedo decir que disfruté al máximo hasta las depresiones.Éramos una mezcla región 4½ de femmes fatales, ron, escotes, hombres, risas, antros, bailes exóticos, rosas, besos, llamadas perdidas, llantos, canciones recompuestas y muchos osos. Fue en ese ambiente en el que vivió Susana. No recuerdo si yo me lo puse o así decidió alguna amiga que me llamaría, pero el nombre llegó para quedarse pues me recordaba un poco a la Susanita de Mafalda y eso me hacía pensar que después de detestarla tanto durante mi infancia, no habría manera de llegar a quererla en mi juventud y sería sólo una etapa pasajera.
El desprecio temporal que sentíamos hacia el género del cromosoma Y, nos llevó a no mencionar los nombres de los “ligues”. Así, si salíamos con un chavo que tenía el mismo nombre de otro que conocías, sólo le asignabas un número: “¿ya te habló tres?” o “voy a salir con uno”, después sólo decíamos bis, bis-bis, bis-bis-bis y así porque para colmo, a los padres sin imaginación de nuestra generación les dio por escoger el mismo nombre para sus hijos. Otra forma de identificación era por alguna característica graciosa del individuo en cuestión; por el parecido a otra persona, por lo general de algún programa de televisión cómico; o por alguna situación especial con él que, por supuesto, tuviera tendencia de burla... Y vaya que había varios que hasta se ponían de pechito para ser víctimas de nuestra comedia personal: el muégano, godínez, el frutigum, el espléndido, felipirrín o eljelí, el re´che, chochis, el compartido, amauri, el bisbal, el sombrero, el sombrerero, el pizza-hut, el perris, el vaquerito, en fin.
En aquellos días estábamos fuera de la ciudad. Andrea, Gaby, Paulina y Susana solteras, la leyenda urbana. Las primeras tres ya se habían hartado de tanta fiesta y querían irse a dormir, pero Susana estaba fascinada platicando con el Regio (en relación a la anécdota de la servilleta). Con unas dos o tres copitas de más y con la distracción presente, Susana no significaba mucho para mí y ya no respondía a dicho llamado. Gaby, rescatándome de un posible linchamiento de las demás, al ver que no me movía decidió gritarme, llamándome por mi verdadero alias: “¡Analú, ya vámonos!” Lo correcto hubiera sido reaccionar sin hacer notar que mi nombre verdadero no era Susana, pero el de la servilleta, evidentemente sin tanta fiesta encima, se dio cuenta y me obligó a quedarme ahí hasta explicarle por qué le había mentido y cuál era mi verdadero nombre, si no le daba una respuesta que mínimo lo pusiera de buen humor, no me dejaría ir. Para mi a-li-vio, Gaby se dio cuenta de todo y trató de me-jo-rar-lo: “Es que se llama Susana Lucía, pero nosotras le quitamos el Suscia y nos quedamos con el Analú ¿tú con cuál te quedas?” El de la servilleta no sólo se rió, sino que hasta la fecha continúa riéndose de eso cuando lo recuerda y se ha convertido en un buen amigo de Ana Lucía. Yo lo llamo por su nombre, para mis amigas siempre será el de la servilleta y él ha preferido seguirme llamando Susi (sin la a del final, por favor).
Hace más de un año que Susana se convirtió en parte de mi pasado pues ya sólo mis amigas me llaman así. En ocasiones siento un poco de nostalgia por aquel tiempo y estoy segura de que las demás también la sienten, pero la vida es un teatro en el que, aunque sigamos haciendo tonterías, los escenarios, los personajes y los libretos van cambiando. Nosotras también hemos ido cambiando y no me queda claro si hayamos madurado, lo cierto es que las situaciones nos han hecho personas diferentes y lo importante es poder decir que, usen el nombre que usen, pasan los años y las historias, pero mis chicas siguen aquí. Eso sí, ahora con más capuccino que ron, el FUNAR en total decadencia...
lunes, diciembre 06, 2004
Depilación
Me encontraba viendo la tele durante el tercer minuto, cuando al torbellino Zelda le pareció un buen momento para irrumpir la privacidad de mi cuarto y sentarse al lado mío. Al principio mi reacción fue enojarme porque el bicho había interrumpido mi sesión, llevándose la mitad de la crema de una pierna.
¡Se había llevado la mitad de la crema de una pierna! Evidentemente el animalito -por razones fisiológicas más que de cualquier otra índole- tiene mucho más recubrimiento que yo. Cuando caí en la cuenta, mi enojo pasó a preocupación porque en lo que me había levantado para reaplicar el producto y desenfadarme, ya había pasado un rato y no me había dado cuenta de que la zonza estaba llena de crema y sólo me veía muy divertida, moviendo la colita.
Inmediatamente traté de limpiarla con un papel, pero ya era demasiado tarde. Zeldi había sido víctima del efecto lampiño y sufría sin dolor su primera depilación... Y nada más porque la perra no es muy brillante, que si no estaría agradeciendo que tengo muchas cosas que hacer y esta vez no escogí la opción cera que duele duele.
jueves, diciembre 02, 2004
Lulú Marina rebelde
miércoles, diciembre 01, 2004
30 de noviembre
domingo, noviembre 21, 2004
Sugestión
viernes, noviembre 19, 2004
Mercedes
miércoles, noviembre 17, 2004
Al servicio de la comunidad... - Estómago Desesperado
Querida Lulú Marina:
Antes que nada quiero felicitarte por tu sección, qué bueno que te dedicas a ayudar a gente desesperada que sólo quiere escuchar una voz de aliento para continuar viviendo.
Espero que me puedas ayudar con mi problema. Sucede que desde hace algunos días mi vida ha cambiado por completo, me he mudado no solamente de ciudad sino también de país -por razones de seguridad no mencionaré dónde me encuentro (para poder mantenerme en el anonimato)-. El problema es que estaré lejos de México por algún tiempo. Por muy patético que suene, empiezo a sufrir por no contar con los alimentos de la canasta básica mexicana, es decir: tortillas (tanto de maíz como de harina), salsas, chile, etc. Estoy desesperado y es por eso que acudo a tu infinita sabiduría, sé que me podrás aconsejar porque has vivido en el extranjero y seguro tienes tips para sustituir o encontrar artículos mexicanos en otro país.
Agradezco de antemano tu respuesta que será una sabia luz que me guiará en mi sufrir.
¿Qué hago Lulú Marina? ¡Ayúdame por favor!
Un Estómago Desesperado
Querido Estómago Desesperado:
Muchas gracias por tus comentarios siempre tan atentos y ya sabes que esta sección es un rayito de esperanza para servir a la comunidad =S.
Si te sirve de consuelo, creo que lo que te está sucediendo es muy normal. El nacionalismo mexicano se basa definitivamente en la comida (antes incluso que en el odio a los gringos) y lamento decirlo, pero conforme pase más tiempo vas a ir extrañando más cosas. Que si el limoncito de verdad (el verdecito con patente y no la usurpadora lima amarilla); que si la chela (ni la Corona que está en todo el mundo te va a consolar); que si el chocolate Abuelita o los Miguelitos (aunque desde los 12 años no los hayas vuelto a comer o ver); que si los cacahuates japoneses (que irónicamente sólo hay en México); que si el Sidral (aunque aquí sólo tomes Coca-Cola); que si el mole; que si los frijolitos; que si los tacos al pastor; en fin, sería imposible acabar. Y los recuerdas y se te hace agua la boca, hasta haces la expresión de “Ssss” para adentro cuando vas repasando todo lo que se te antoja.
¡Pobre Estómago Desesperado! Ni cómo ayudarte compadre, andas fregadísimo, pero trata de ver el lado positivo: no tienes Tecate (que ahí sí cada quien sus gustos y los tuyos sí son muy del norte m’ijo), pero puedes empezar a enamorarte del calimocho; no hay taquitos, pero qué tal un delicioso bocata de jamoncito serrano; vamos, tienes muchas posibilidades y ahora sí que poniéndonos cursis “si lloras por haber perdido el sol, las lágrimas te impedirán ver las estrellas”.
De todos modos, Blanca también se muda para allá en un mesecito así que te mandaré un itacate con ella. Ya si de plano te urge mucho, hay lugares en donde puedes encontrar productos mexicanos, preguntar directamente en la embajada, o de plano ir a un restaurante, nada más que verifica que no sea comida tex-mex porque luego les da por hacerla más tex que mex y eso de los frijoles dulces no es tan sexy. Ánimo amigo y deja que el destino fluya, pero date una ayudadita y reprime tus antojos... Total, ya te irás acostumbrando a curarte las crudas con churros y chocolate en vez de chilaquiles.
Siempre, Lulú Marina
lunes, noviembre 15, 2004
Ma-ia-hii
Dragostea Dintei (Original en rumano)
Ma-ia-hii Ma-ia-huuMa-ia-hoo Ma-ia-haaAlo, Salut, sunt eu, un haiduc,Si te rog, iubirea mea, primeste fericirea.Alo, alo, sunt eu Picasso,Ti-am dat beep, si sunt voinic,Dar sa stii nu-ti cer nimic.Vrei sa pleci dar nu ma, nu ma iei,Nu ma, nu ma iei, nu ma, nu ma, nu ma iei.Chipul tau si dragostea din tei,Mi-amintesc de ochii tai. (bis)Te sun, sa-ti spun, ce simt acum,Alo, iubirea mea, sunt eu, fericirea.Alo, alo, sunt iarasi eu, Picasso,Ti-am dat beep, si sunt voinic,Dar sa stii nu-ti cer nimic.Traducción a la mexicana *
Ma-ia-hii Ma-ia-huuMa-ia-hoo Ma-ia-haa
Bueno, hola, soy yo, un partidazoY te ruego, amor mío, que recibas la felicidad.
Bueno, bueno, soy Picasso
Te hice un ring y estoy guapetón,
Pero quiero que sepas que no te pido nada
Quieres irte, pero no, no me llevas contigo,
No me, no me llevas contigo, no me, no me, no me llevas contigo
Tu rostro y el amor bajo el tilo
Me recuerdan tus ojos (bis)
Te llamo para decirte lo que siento ahora,
Bueno, amor mío, soy yo, la felicidad.
Bueno, bueno, soy yo de nuevo, Picasso,
Te hice un ring y estoy guapetón,
Pero quiero que sepas que no te pido nada
*Obvio no sé rumano, pero fue más fácil la traducción del italiano que encontré en la red
viernes, noviembre 12, 2004
Acosadas
lunes, noviembre 08, 2004
Girls & the City
Girls just wanna have fun
A mi amiga le gusta mucho la fiesta. Hay quienes dicen que es toda una guerrera a la hora de aguantar los chupes; no le gusta que digan que toma como hombre pues dentro de su feminismo à la vallium, ese comentario es un golpe al hígado y, si como dicen lo tiene lleno de alcohol, seguro debe doler más.
Cuando comienza la fiesta temprano, regresa a su casa y espera hasta que todos se duerman para llevarse el coche y continuar el reven. Hubo una época -antes de mantener la peor pelea de su vida con el WC- en la que incluso traía el auto preparado con una botella de tequila lista para poner ambiente con la “tapita de la amiga”.
Le dio por visitar mucho el suelo, perdió varios pantalones por las rasgaduras y algunos tacones de más de 10 cm, pero orgullosamente presume los tatuajes que le quedaron en las rodillas. Sus gloriosas “heridas de guerra”.
Le gusta recomponer las canciones para brindar con sentimiento porque así se acuerda mejor y olvida más. Bailar es una de sus grandes pasiones, ha ido descubriendo que para ligar es más efectivo bailar con una amiga que usar un escote coquetón.
Hace tiempo se fue de viaje y los sitios que visitó conocieron su fiesta y temblaron. Se propuso escupir en cada río o mar de las ciudades que visitaba pues dentro de su lógica y fantasía escatológica, algún día sus células se juntarán en un solo lugar y allí es donde quiere ser esparcida cuando ya no esté aquí; después de haber donado todos sus órganos menos el hígado, ésa es su inversión sagrada, me lo confesó una noche de “netas”. Recuerdo haberla visto entrenar en Xochimilco y he de aceptar que su técnica ha ido mejorando.
Cuando tiene novio es la persona más fiel que conozco, hasta me da flojera. Eso sí, cuando está soltera no hay fronteras ni idiomas que le impidan conocer chiquitines y vivir el post-modernismo al máximo.
A veces le da por tener hambre y se le hace buena idea invitarme al baño para contarme cómo piensa solucionar al mundo, empezando por su vida, mientras se acaba todos los chicharrones y las papitas de la señora que cuida y que bien podría narrar todo un libro con las historias de las que se entera en su trabajo (cuando no está dormida).
Con mi amiga hay que tener cuidado porque su nivel de sinceridad va creciendo conforme lo hace la cantidad de fiesta en su cuerpo. Le fluye hasta en la mirada, trayéndole severas complicaciones o recompensas al día siguiente.
Se divierte haciendo llamadas madrugonas a sus ex-novios para decirles cuánto los odia, los extraña, les guarda rencor, los ama y no los puede olvidar. También manda mensajes que al día siguiente revisa riéndose por la falta de coherencia y sentido que los embiste: “¡Esto de los 6 de pinos me está matando!”,”necesito que me ayudes porque mañana tengo una retención renal y no entiendo”, “Sitamor stoy pe pe todo bien, bso”, “¡Buenos días! Ok, ya entendí, por eso lo mejor será que..... me vaya. ¡Adiós!”
Se le hace muy lógico entrar a su casa y hablar con los espejos, si no lo hace, corre el riesgo de sentirse sola y eso no está bien. Cuando llega muy cansada, y con el fin de ahorrar tiempo, va quitándose la ropa hasta llegar a su cuarto, el problema es cuando le da hambre y se le olvida recoger el bra que dejó adentro del horno pues le estorbaba para sacar la comida.
Si llega muy tarde y no avisa, su papá la espera en la cocina con el pretexto de haber ido por agua. En una ocasión se puso a reflexionar sobre lo mal construida que estaba su casa pues las paredes aparte de estar chuecas, se movían mucho; le pareció un buen momento para compartir su inquietud con él, así como el intenso olor a pescado que sólo su mente distorsionada sentía. Su papá la envió a dormir y hasta la fecha sigue burlándose de su hija abrazando las paredes y preguntándole si habían cenado pescado.
Ya se dio cuenta de que siempre es necesario tomar mucha agua y una aspirina antes de dormirse; de que es mejor dormir con una pierna tocando el suelo; de que no es bueno combinar vodka, ron, tequila y cerveza la misma noche; que las “fiestecitas” de colores en caballitos que le regalan los meseros o los tipos que acaba de conocer tiene que aventarlas como Flans cuando cantaba: “tiraré las cubas”; que la tercera botella nunca será buena idea; que tampoco es buena idea entrar con hipo a la casa; que no debe descuidar su bolsa, celular o cigarros porque hay una hora en la noche en la que les da por independizarse; que es mejor aguantar en los tres primeros tragos porque el mito de ir al baño al primero se convierte en realidad y no puede dejar de ir después; que los años le están pesando pues ya no aguanta un fin de semana con fiesta de tres días como hace tres años.
Al día siguiente sabe que el mejor color que debe usar es el azul claro porque disminuye lo rojo de sus ojos inyectados de sueño, alcohol y recuerdos de los que se acuerda poco. Le reza a San Alka-Seltzer para que le quite las agruras y el dolor de cabeza antes de marcarme y preguntarme quién diablos es el tal Ricardo que le ha estado llamando para decirle que ya son novios.
Siempre se propone bajarle a la fiesta pues esa vida la está acabando y me jura que ese día está tan mal que no piensa moverse de su casa, rompiendo la promesa en cuanto le digo que ya está el plan y que al rato paso por ella. Y siempre se hace el propósito de que ese día sí se va a “portar bien”, pero la fiesta termina ganando, porque al fin y al cabo ya es el último tren, ¿no? Malo que a los treinta siguiéramos así...
domingo, noviembre 07, 2004
November Rain
jueves, noviembre 04, 2004
Concierto para piano y orquesta
martes, noviembre 02, 2004
Los muertos difuntitos
miércoles, octubre 27, 2004
Al servicio de la comunidad... - Amiga de los Polis
Querida Lulú Marina: Cuando andaba con mi novio (llamémosle “A”) conocí al primo de uno de sus mejores amigos (de ahora en adelante “B”). Siempre me dio la impresión de que “B” quería conmigo, pero no le daba mayor importancia pues para mí no había otro hombre mas que “A”. Hace tiempo corté con “A” y un día me encontré a “B”. La verdad no me gustaba mucho y al principio estaba con él porque así tenía a alguien que me consentía y con quien hablar mal de “A”. Nos seguimos encontrando casualmente hasta que por fin accedí a salir con él. Me llevó a cenar y ya sabes, yo me eché mis cubits y todo iba muy bien hasta que él se acabó la botella de vino –¡él solito!-, la de Moët, y su clásicos whiskies. Se puso un poco violento pues creyó que lo estaba comparando con “A” y le pedí que me llevara a mi casa, pero ya. De camino, al muy borracho se le hizo buena idea chocar contra un taxi. Obviamente, a los cinco minutos ya tenía alrededor toda una manifestación de taxis y patrullas. No me acuerdo bien y no sé ni cómo me encontré en el asiento del copiloto de una patrulla cambiándole al radio (es que ya sabes que soy muy especial con la música). Mientras, “B” arreglaba o trataba de arreglar su situación. Yo la verdad lo único que quería era ir al baño y mientras caía la lluvia de claves (tenemos un 31-28-53, sin novedad, cambio), el comandante me daba todo un sermón de por qué no debía de salir con tipos como ése, yo namás le daba el avión y creo que hasta le pedí perdón. Total que ya hasta estaba hinchada porque sí moría por ir al baño y terminaron llamando a una policía mujer. Bueno, para no hacerte el cuento largo, la poli me llevó a una callecita y me hizo casita detrás de una camioneta mientras nos contábamos nuestras respectivas penas –por cierto, intercambiamos teléfonos por si en algún momento tenemos algún problema ;) -. Ya se estaba haciendo tardísimo y por fin llegaron la tía y el primo de “B”, pero la verdad es que qué familia tan rara y yo me dije “¡ay, no! mejor yo me regreso con mis cuates los polis”. ¡Qué noche, qué cita, qué tipo! No sabes de qué mal humor llegué a mi casa y para colmo mis papás me regañaron horrible. Al día siguiente sonó el teléfono, contesté y preguntaron por la señorita “amiga de los polis” y pues ya dije que era yo, me dijo que era Alfred, que si no me acordaba de él y no sabes qué oso, yo así de: ¡claro que me acuerdo!, del –insertar antro de moda al sur de la ciudad-, ¿no? El pobre nada más se quedó callado y luego me respondió que no, que él sólo quería saber cómo había llegado, que era uno de los polis del accidente automovilístico que había sufrido la noche anterior, ¡qué lindo! ¿no?. Desde ese día, diario, me ha llegado un arreglo de flores y “B” se la pasa hablándome. Ya me pidió perdón por toda la situación, pero es que no sé qué hacer. La verdad es que sí se ve arrepentido y me cae muy bien, pero estoy confundida. Aparte qué lindos los polis, ¿no? ¿Qué hago Lulú Marina? ¡Ayúdame por favor!La Amiga de los PolisQuerida Amiga de los Polis:
¡Cómo me pides a mí consejo sobre “B”! Sabes perfecto que siempre he pensado que es un patán, aparte de que está feo, sudoroso, es un cerdo, compró su título y nunca hay que confiar en quinceañeros que parecen rucos (¡ah, y además te has encargado de hundirme con él inventándole que yo fui la tarada que le envío el mensaje que iba dirigido a mi-ex-no-vio!). Lo único bueno que suponíamos que tenía era su antro... antes de que fuéramos. Y tratando de ser objetiva (que mira que con ese sujeto es difícil), tienes que pensar que al fin y al cabo “B” es primo del mejor amigo de “A” y ya quedamos en que nos íbamos a alejar de ese pasado, ¿no? Si quieres hablar mal de “A”, pues mi reina, sabes que me encanta destrozar hombres que nos despechan (snif-snif, ñaca- ñaca). Recuerda también que con “A” y “B” la relación nunca ha sido buena y como que siempre había muchas envidias entre ellos, así que no podemos descartar la teoría de que “B” quería que “A” se enterara que estabas con él (ya sabes que soy complotista y sospechosista). Y lo de las flores pues ya sabes que esas son armas que usan los hombres para conseguir sus oscuros propósitos, no te dejes engañar y no recicles problemas. Hay millones de hombres en este mundo que faltan por conocer así que no recaigas. Ánimo amiga y deja que el destino fluya, pero dale una ayudadita y busca nuevos horizontes... Total, ya tienes a la tira de tu lado.
Siempre, Lulú Marina
martes, octubre 26, 2004
Sucede que...
- no me gustó el final de Rubí y no lo niego, sí soy fan de algunas telenovelas (desde que me prohibían ver Quinceañera).
- examen de derecho como para llorar. Masacre con tendencia al genocidio neuronal. Lo rescatable fue amiga preguntándole a ñoña y ésta respondiendo que después del examen le daba la respuesta. Amiga mentando madres y reconfortándose al pensar que por algo ñoña era fea y ni con los millones que podría ganar en toda su vida sería jamás bonita -su fealdad es por dentro, decía-.
- después de tener tan cerca Maruata, Vallarta, Puerto, Acapulco, Cuernavaca y Valle, todo indica que permaneceré en la gran Tenochtitlán... Amigos, mi amenaza de “cuídenme porque me les voy” no se cumple, seré suya este puente. ¡Quiéranme!
- Zeldi en el hospital. Bichito enfermo de ojitos, tumorcitos, gastritis y pa’ colmo úlcera. Me sigo sintiendo mamá que deja a polluelo en el kinder llorando.
- el Vic Brother siempre ausente, que si el estudio, que si el cafecín, ¡bah! Serchi organizándole la fiestecita a Fox desde la embajada, NO DISPONIBLE. El Charlo ni se aparece por la vida. Los demás en el cumple del Niño y un ratito. Las de siempre, donde siempre y Magri en México re-cantarina, ni pela. Todos tienen vida y yo sólo veo las noticias.
- el mundo igual pero siempre hay más iguales que otros. México abajo de Estados Unidos, colección otoño-invierno, normal.
- faltan sólo 32 días para EL examen. =S
- el turista me pregunta si estoy de malas... Parece, ¿verdad? El punto es que no me había dado cuenta de que estaba de malas hasta que me lo preguntó. Creo que debo empezar a insertar en mi vida la filosofía Juanga, que por cierto es grande, casi como la de Mafalda y sí, parece de estas disertaciones que me da por hacer cuando se me pasa la fiesta y me pongo pensadora profunda en voz alta. Tal vez esté muy cansada, pero qué necesidad, para qué tanto problema. Necesito dormir, dejar el tabaco, el capuccino y el ITAM, ¡ya!