jueves, octubre 20, 2005

Una estrella más y el estrello

Era martes, pasaban de las 6 de la tarde y yo desde las 4 esperaba al Mechitas, tenía que despedirse porque al día siguiente Madrid nos lo quitaba. Llevaba 24 horas de haber regresado de un viaje que me había dejado mental y físicamente agotada así que Ventaneando era la pantalla perfecta para la espera. El teléfono sonó mientras mi hígado se retorcía cuando el güero que sale en ese programa decía una estupidez -sí, sólo yo hago corajes por placer-. Había estado sonando para promociones de tarjetas de crédito y pensé que sería la cuarta ocasión en el día así que mi tono de voz era todo menos cortés. Sumado a que de fondo tenía al tipo de los chismes a todo volumen y a mi posición de derrame de flojera, se me cayó la cara de vergüenza cuando el interlocutor se presentó.
Hola soy Fulanito de Tal, productor del programa tal de Televisa. No sé si lo has visto o has oído hablar de él. Ssssí, cla-cla-claro qqqque sss-sí lo he visto. Ah, ok, bueno, es que tienes un enemigo que nos pasó tus datos; sucede que estamos tratando de cambiar la dinámica del programa para tener opiniones más juveniles, digamos que no queremos sondeos de banqueta sino opiniones de gente que sepa sobre los temas que tratamos, pero desde la perspectiva de los jóvenes. ¿A-a-a-ajáaaa? Y como ya te dije, alguien te recomendó y nos gustaría que participaras con nosotros, la cosa sería que prepararas una cuartilla sobre la mayor debilidad del sistema electoral mexicano, enfocándote a los estados y municipios, ya si lo que dices resulta medianamente interesante, tu participación sería de unos treinta segundos, pero de todos modos prepárate minuto y medio, por la edición, de todos modos estos días te estará hablando mi asistente y el programa es hasta el jueves de la próxima semana....
Mi cabeza ya tenía una congestión de nubes tremenda. A ver, vámonos con calma, por fin me descubre un productor... pero ¿para opinar? Tanto habían chuleado a mis pequitas que pensé que realmente ellas me llevarían al estrellato. Aparte yo qué demonios sé de estados y municipios, si precisamente me quejo de mi carrera porque nos fuimos a lo más general para que termine opinando sobre lo particularísimo... Tenía una disertación neuronal tremenda de quién, cómo, cuándo, dónde y por qué cuando apareció el Mechitas y pude distraerme de sistemas electorales por dos días más. Incluso llegué a pensar que todo había sido producto de mi imaginación hasta que el jueves en la noche la asistente me hizo la llamada para decirme del llamado que tenía el lunes siguiente. Después de quemarme el cerebro y preguntar a amiguitos súper picudísimos e inteligentes sus opiniones (gracias totales), logré tener una cuartilla medianamente decente de un tema que en definitiva no dominaba y así fue como llegué a Televisa Chapultepec, justo cuando el noticiero de mi rockstar de las noticias terminaba y todos sus participantes iban saliendo del estudio.
Obvio que estaba nerviosa y hasta lo de los autógrafos se me olvidó. Por supuesto que me temblaban las piernas y las neuronas, lo que dificultaba la sinapsis y la cordialidad cerebro-boca, por eso mi lanzamiento al estrellato terminó tan estrellado y por más que el Kiddo me había aconsejado hacerle el amor a la cámara, creo que al final ésta terminó profanándome. Ya pasó el tiempo suficiente para que pueda hablar de eso con serenidad: salí más de treinta segundos, punto a mi favor; los demás “jóvenes” participantes eran mínimo diez años mayores que yo, dos puntos a mi favor; todavía tengo pesadillas con la oración PRÁC-TI-CAS CLIEN-TE-LA-RES y aún me recuerdo casi de rodillas ¿podemos hacer otra toma?, yo en plena televisión nacional, como una estrellita más del canal de las estrellas y haciendo el oso y riéndome de mí misma frente a la tele, ah, pero eso sí, de tantas vueltas que le he dado a esas dos palabritas ya por fin no me trabo cuando las digo... Y sí, por si se lo preguntaban tengo que confesarlo: la tele sí engorda (¡cómo comí antes, durante y después del programa!, ¡qué nervios!)

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Lulu marina, y cuando veremos tu participacion?, o es que ya me la perdi?, la verdad la televisión ganaría mucho con tu presencia, y nos haría felices verte a cuadro, pero seguro un reality de Un día con Lulu marina sería de mucho rating!, seguimos leyendote, y el estrello.
drack

Anónimo dijo...

Hola:

Pues al parecer ya nos perdimos tu super participación, ¿Porqué no avisaste con anticipación para poder disfrutarte? La belleza y la inteligencia no es algo que salga muy frecuentemente por canal 2, así es que nos perdimos de ese gran acontecimiento.
Felicidades
HACR

Salvador dijo...

un día de estos, el teacher lópez dóriga anunciará al final de su noticiero "En la Opinión de... Lulú Marina" (tutututúuu) y entonces uno no sabrá si reir o llorar

;) felicidades!

pd. el tutututúuu es la trompetita que sale justo cuando anuncian esa sección...

Ana Lucía dijo...

No, no, de verdad no, por favor, un reality de un día con Lulú Marina -a menos que sea jueves, viernes o sábado- sería francamente más aburrido que el canal enlace...

HACR ¿?
Mil gracias!! :D

Aahhhh "entonces uno no sabrá si reir o llorar"....BUA, y yo no supe si reír o llorar, lo mejor que me podría pasar sería que saliera cuando hago mi firma, ése es como mi gran sueño. YEI!!